A Nadie dejarás entrar

En el Génesis, dice que cuando el hombre sale del paraíso, el Creador puso un ángel, armado con una espada flamígera para que a Nadie dejara volver a entrar. ¿No es Luzbel el nombre de ese ángel que nos impide entrar? Solo si llegas a ser Nadie ese ángel te deja pasar.
Cuando fueron a entrar a la tierra prometida, el ángel que le habló a Moisés le dijo que a Nadie dejara vivo cuando llegaran, que mataran a todos, mujeres y niños. Me impresionó leer que les ordenó que, si veían a una mujer embarazada, la pasaran a espada, sacaran al niño y lo asesinaran. Nadie debía quedar vivo. ¿Qué único ángel Luzbel pudo decirle eso a Moisés? Y eso en la carne suena parecido a:
Jesús te dice que, para entrar en su reino espiritual, tienes que negarte a ti mismo. Si eres Nadie entras, tienes el vestido de bodas. Sin el vestido de negarse, aunque te llamaras Saulo, no entras, no importa cuán grande seas, Nadie entra. Nadie importa mucho ¿cierto?

Nadie, como todos, es palabras

Por medio de las palabras que le pertenecen a Nadie, podemos hallar el ser de Nadie. Las palabras de Nadie definen la existencia de Nadie. Les recomiendo tratar de conocer a Nadie profundamente. Es posible de verdad conocer a Nadie así, ya que también Nadie eres tú, peligrosamente vacío de ego, cuando de verdad te niegas a ti mismo.

Jesús enseña que puedes conocer a Nadie bien, antes que la muerte te vuelva Nadie. Irás por senderos que Nadie había trazado previamente y a Nadie te hallarás por esos senderos de pensamientos. Nadie sabrá que te estás negando y Nadie te podrá ver en ese proceso de dejar de ser tú. Alguien te verá y no sabrá que eres Nadie, que no eres alguien, creerán que eres alguien. Cada día admirarás más a Nadie. Y si todos somos palabras, el viaje es a través de las palabras y a través de ellas debes desaparecer, ser Nadie. Confía en lo que Jesús (y Nadie además de Él) te enseñará para negarte, o no serás Nadie antes de irte de esta Tierra; habrás vivido en vano. Tus palabras se las llevará el viento.

Nadie sabe el día y la hora del fin de la humanidad.

Dijo Jesús que cuando Él venga por segunda vez, Nadie va a estar seguro de si mismo, Nadie se va a poner muy contento. Nadie no va a estar asustado, Nadie no preocupado. Nadie no va a estar inseguro. Nadie va a estar fresco y relajado.

Y de ese día Nadie sabe, ni los ángeles del cielo, ni el hijo mismo, (Jesús), sino solo el padre …. Nadie además de Él. Y lo dijo Jesús.

Mira cómo se van descubriendo las frases que tienen que ver con Nadie. Frases importantes de Jesús. frases que tienen que ver con todos nosotros, los que no somos Nadie.

A las palabras de Nadie, al ser de Nadie, Nadie le había prestado atención, obviamente. Pero solo si deseas negarte a ti mismo, llegar a ser Nadie, te encuentras con las palabras de Nadie, con los pasos que Nadie había dado antes.

Tomar los pensamientos de Nadie es tan relajante........

Es tan relajante tomar prestados los pensamientos de Nadie para leer la realidad. Es maravilloso dejar de lado, los pensamientos y juicios que tomamos prestados de los demás, para evaluar nuestras vidas, y leer el mundo con los ojos que Nadie lo ve. Queda uno casi vacío y eso es tan relajante, es un descanso tener los juicios de Nadie muy en cuenta.

Solo así puedes ver las escrituras que los hombres han llamado sagradas con los ojos que Nadie las había visto y conocer al jefe Jesús como Nadie lo ha dado a conocer. Como a Él le gusta.

Es maravilloso el modo de pensar y juzgar de Nadie. Me postro confiado a los pies de Nadie, porque Nadie me tiene fascinado, asombrado con sus pensamientos. Les recomiendo a Nadie.